Tengo demasiadas cosas
cosas que no me pertenecen
cosas que heredé, miles de libros
mucha ropa
objetos que fui recolectando
zapatillas que compré porque me gustaron y después no
que eran talle grande o chico
revistas de la infancia que me hicieron crecer pero que ya no leo
cables de cosas que desconozco
notebooks, dos, que no andan
un montón de papel en blanco y escrito
cartucheras llenas de lapiceras
diez mil millones de folios
dos cajitas de chapitas de cerveza
tres sillas ninguna lo suficientemente alta
dos parlantes, uno no anda
apuntes miles
y por poco casi tengo miles de películas
doscientas radios viejas
más ropa y más libros
más papel, más folios
más zapatos inútiles.
No sé si soy acumuladora o sólo temo tirar
o quizás eso es suficiente para declararme acumuladora
es que me duele tanto el mundo que siento culpa si
me deshago de las cosas como cualquier consumista
no quiero tirar a la calle lo que sé que tiene potencial pero nadie lo recojerá
no quiero que se termine de desperdiciar
pero mi casa es muy chica
y no me alcanza la vida para ordenar todo lo que tengo
tengo que liberarme, sino no podré ser feliz
y creo que eso es lo que importa más,
al final del día.