miércoles, 15 de julio de 2015

I Candados

Le temo al tema
el tema de la inseminación
que penetra inquebrantable
al poro de mi piel.

Algo está mal aquí
algo, algo
escapa de mi claridad
el vidrio se empaña de 
mi propia agitación

El temblor que se genera
turbado en el centro
cuando una sonrisa no te convence y
cuando su mirada tampoco

Cuál es la necesidad de encontrarme
dependiente
del pretendiente
como si el existente fuera
mi amor e inconveniente?
Cuál
casual sinusoidal
cochino disgusto 
en asquerosa pretensión,
por favor,
basta.
Ya fue suficiente inseguridad
la que me aportó la calle, ya fue suficiente
la causalidad del presente, fue
suficiente pensamiento, ya fue
ya fue la mente.
Me suena a que es hora
de sentir el diluvio
sin dolor de cutis,
sin lagrimear por miedo
siéndome fiel y real
simplemente.


No hay comentarios:

Publicar un comentario