lunes, 5 de noviembre de 2018

Fa mil lágrimas

Estoy con ganas de llorar, es así
ojalá tuviera alguien al lado para abrazarlo
mientras me moqueo toda y le digo todo lo que me perturba.
Estoy con ganas de llorar y estoy sola
entonces lloraré palabras escritas, o más bien tipeadas
en esta hoja blanca virtual
que me es tan cálida.

No es que no quiera lo mejor para la gente que conmigo convive
sino que quiero que aprendan pero no todo por chocarse conmigo,
no quiero ser la oposición de todos sus pensamientos, no quiero ser la oveja tan negra
principalmente porque no quiero que me ataquen
tan constantemente como lo hacen
no quiero que me vean siempre ajena, egoísta, osada, rara, desviada
quiero que vean también mi corazoncito frágil
y lo recuerden cuando tienen algo en contra mío.
Estoy muy agotada de mi vida, de mis decisiones que tanto esfuerzo me piden
estoy agotada pero sigo porque hay que seguir
y este contratiempo que en mi caso es mi familia no lo tomé en cuenta
y no sé cómo hacerlo
¿cómo tomo en cuenta lo mal que me ponen, lo triste, lo frustrada
cómo cuento ese tiempo que me quitan?
Más bien, ese tiempo que desperdicio
llorando como ahora
escribiendo infinidades como ahora
y sintiendo pena por mí cada vez que alguien me cuenta
cómo su familia los apoya
los va a ver en sus éxitos, les da amor
les da amor de más.

Simplemente no tengo eso. Qué más da.
Simplemente estoy sola en esta casa de 5 personas.
Simplemente soy otra. Soy distinta y eso es para hostilidades.
Simplemente tengo que cuidarme.
Tengo que seguir resguardando a mi corazoncito frágil
que quiere abrazarlos y que confíen en él con pureza.
Pero qué puedo hacer yo si tienen una espada que les atraviesa el pecho desde la espalda
qué puedo yo hacer si cuando me acerco me pincha
qué puedo hacer si me guardan rencor.

Nada. Tener cuidado.
Estoy en mi casa y tengo que tener cuidado de estarlo.
Estoy sola en esta casa de 5 personas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario