nana

cuando me falta algo
pienso que es mi papá.

cuando no encuentro satisfacción en nada
cuando estoy tristona y de baja energía
cuando necesito amor y no sé a quién pedírselo
o de dónde sacarlo
pienso en mi papá
pienso en la constante disponibilidad
que tenía conmigo
pienso en sus seguras ganas
de atender mi llamado
una llamadita corta que a los dos nos reconfortaría
una caricia al corazoncito, diría él,
un abrazo a la distancia.

cuando necesito un abrazo gigante
y no es el de nadie en específico
pienso en mi papá
cuando necesito una dulzura
que no sé pedir
sé, con una certeza irrevocable,
que a él le encantaría ser
ese calor
ese masaje en la espalda
esa estufita que me devuelve el vigor en un santiamén
ese mimo enorme que me envuelve
esa cosa paternal indescriptible
inmensa y transparente
invisible para las palabras
infinita y sencilla
como una tormenta de arena
placentera y suave
como la más tierna placenta
en la que me acurruco ronroneando
haciéndome chiquitita
muy chiquitita
diminuta
miniatura
niñita
que sonríe tranquila
obteniendo la calma y el cobijo
que necesitaba tanto
me hago un punto
en la inmensidad de su abrazo y calor
me hago un ínfimo punto
que desaparece de a poco
hasta dormirse
calentita
(contenida
y contenta)